Pasaron dos meses cuando volví a encontrarme con Jia Han. Mi amiga de la infancia y yo viajamos hasta Beijing para tratar de hacer algo de nosotros mismos. Sin embargo, una noche a fines de otoño, se suicidó después de hacerme una última llamada telefónica. Ella me había confiado que su superior en la oficina la tocaba de forma inapropiada de vez en cuando. Cuando me decía todo esto, a veces indefensa y a veces triste, siempre la consolaba y le decía: —Si no puedes soportarlo más, cambiemos de trabajo.— ... Quién hubiera dicho que se había ido sin hacer mis palabras realidad.
Me estaba culpando a mí misma y decidida a descubrir la verdad. Entré y salí de la compañía tratando de encontrar algún testigo o alguien que supiera algo. El resultado de mi interminable apuro fue que me despidieron de mi propia empresa. Y no hay ninguna empresa en mi campo que se atrevería a contratarme más, porque mi reputación era... terrible.
Leí en el periódico que había una chica que firmó su contrato con la empresa contratante y dijo claramente que no se permitía el acoso sexual. Entonces, esta chica fue ridiculizada por la compañía y ninguna compañía la entrevistaría durante los próximos tres meses. Si hubiera leído esto antes, probablemente también me hubiera reído con desaprobación. Pero justo en este momento pude sentir profundamente lo difícil que era pedir ayuda para una mujer en esta sociedad masculina dominante. Aun así, todavía estoy dispuesta a luchar por la justicia que merecía mi mejor amiga fallecido.
Para ganarme la vida, me vi obligada a hacer trabajos ocasionales. Tuve un poco de formación en bellas artes en la universidad y me ofrecí como docente en museos, por lo tanto, decidí probar suerte en las galerías de arte de Beijing para trabajar como comerciante de arte.
Respiré hondo y entré en la Galería Zi Xiao en el distrito comercial de Xintiandi. Después de una observación, parecía que solo había una persona trabajando allí. La galería estaba decorada en un elegante tono azul claro, y alrededor de una docena de pinturas colgaban densamente en un espacio de aproximadamente 200 metros cuadrados. Miré cuidadosamente alrededor, no había etiquetas de precio en las pinturas. Lo sabía, o el dueño de la galería era arrogante o él estaba jugando algunos trucos, decidí probarlo. Cuando estaba en la universidad, tuve este "excelente desempeño" de subastar una pintura que se valuó en $20 por $2,500 en una subasta simulada. Este tipo de pinturas sin una etiqueta de precio fueron las adecuadas para desatar mi talento. Además, necesitaba dinero para presentar una demanda para mi amiga.
Mientras reflexionaba, Jia Han vino a mi lado sin que me diera cuenta. De repente sentí una sombra debajo de mi mano derecha y rápidamente bajé la cabeza.
Me sobresalté un poco. Esta vez llevaba puesto un traje negro ajustado con unas elegantes gafas con montura negra en la cara. No sabía por qué, pero sentía que su aura estaba en sintonía con este lugar. Parecía tener una sensibilidad innata para las artes. Si mi impresión de él en el Parque Zhao Yang era un chico de al lado, en este momento era un profesional capaz. Decidí presumir un poco.
—¡Qué coincidencia, nos encontramos de nuevo!
Él sonrió gentilmente.
—Estoy aquí para ver las pinturas, ¿tú también?
Él asintió.
—¿Estás aquí para comprar pintura? ¿Está bien dejarme hablar sobre mi opinión sobre esta pintura?
Me miró con gran interés, lo que me hizo bastante feliz. Empecé a soltar palabras.
—El estilo de esta pintura imita a Monet... mira esa línea, esa composición y el uso de los colores. Pero todavía tiene su propio estilo, porque el escenario natural es chino, ¡jaja!— Solté sin pensar, después de ver que la casita del cuadro parecía un pabellón chino. En ese momento, me era imposible pensar que me encontraría con un experto.
Me miró con una leve sonrisa y luego miró detrás de mi espalda. Poco después, un miembro del personal le entregó un folleto. Mi cara se puso roja rápidamente después de mirar el folleto. Resultó que esta pintura era una reproducción de 'The Basin at Argenteuil'* de Monet.
Es demasiado embarazoso. Mejor me largaba~ era lo que estaba pensando cuando me entregó un pedazo de papel que tenía escrito:
"Tienes buena vista. Al menos puedes decir que es Monet."
Tomé el trozo de papel con manos temblorosas. Lo miré en silencio. ¿Por qué me lo escribió él, no me lo dijo? Luego pensé en una razón, él era mudo.
De repente, me quedé estupefacta. ¿No sabía qué tipo de actitud debería usar para enfrentarlo? Al mismo tiempo, una idea extraña vino a mi cabeza; en realidad no escuchó nada cuando le estaba sirviendo en el parque. No hay duda de que, como confidente, es muy confiable...
¡Bah! Me desprecié a mí misma. Detuve este pensamiento y me enderesé para despedirme de él.
Justo en ese momento, tomó mi mano y puso otro pedazo de papel en ella. Lo abrí y leí:
"Necesito un vendedor de arte, ¿estrías dispuesta a venir?"
Así fue como me convertí en la vendedora de la Galería Zi Xiao. Jia Han me dio una muy buena tarifa para comisiones. Estaba feliz de poder trabajar aquí.
Jia Han me escribió su nombre. Acurruqué mis labios.
—Pero, ¿cuál es tu apellido?— De repente me di cuenta de que no podía escuchar, así que estaba buscando un bolígrafo en mi bolso para escribirlo por él.
Sacudió la cabeza, señalando sus propios labios, luego me miró de nuevo. Pensé por un momento y luego pregunté.
—¿Puedes entender lo que estoy diciendo al mirarme?
Él asintió, luego se sacudió un poco.
—¿Solo puedes entender algo?
Sacó el pulgar para mostrar su acuerdo. Parecía que Jia Han no quería permanecer demasiado en este tema. Simplemente señaló el nombre 'Galería Zi Xiao' en el folleto y lo pulsó.
—Zi Xiao, Zi Xiao...— de repente caí en cuenta. —¿Podría ser que tu apellido es Sol?*
(*N/T Inglés: Esta es una obra de teatro en caracteres chinos, así que déjame explicarte. El nombre de la galería, Zi Xiao, en chino es 梓 晓 que es la misma pronunciación que 子 小 que cuando se combinan forman la palabra 孙 que se pronuncia "sol". Pero esto solo funciona en chino simplificado)
Mostró sus dientes blancos. Había más aprobación que felicidad en su rostro. Después de un rato, me entregó un pedazo más de papel.
"Me gusta tener un empleado inteligente".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario