martes, 22 de octubre de 2019

Capítulo 05


—¿Está bien así?
Lo sentía caliente entre mis pechos.
—Um, ahora, ¿qué debería...
—... Muévelo, arriba y abajo. 
N~ ¿arriba y abajo? ¿Está diciendo que mueva su cosa hacia arriba para que apunte hacia abajo?
Eh, ¿está bien moverlo por la fuerza?
No tenía ni idea.
—Con tus pechos, como si estuvieras frotándote contra mí.
... Uh, parece que es diferente de lo que pensaba antes. Menos mal no hice nada impulsivo.
Ah, ya veo. ¡Estoy moviendo mis pechos arriba y abajo! ¡No su cosa!
Lo estoy entendido un poco.
—¿Te gusta esto?
Tomando firmemente mis pechos con ambas manos, los moví hacia arriba y hacia abajo mientras él estaba en medio.
Debido a que estaba un poco mojado por alguna razón, pude frotarme más suavemente de lo que imaginaba.
—¡Nh~!
De alguna manera, la voz de Mikhail era...
Y su respiración también. 
Mi corazón incluso estaba latiendo con fuerza.
Cuando teníamos 14 años, su altura estaba muy por encima de la mía. Los dos ya teníamos nuestras propias parejas de compromiso, de modo que se abrió cierta distancia entre nosotros, pero a pesar de que se había convertido en un hombre que solo veía de vez en cuando, mi corazón latía en secreto por él.
Ahora era diferente a esa época. 
Ahora, iba a ser su esposa. 
Además de que a partir de ese tiempo, nuestros cuerpos habían madurado mucho más.
No podría ver su verdadera apariencia, pero podía hablar con él y podía tocarlo.
Y ahora, incluso tengo permiso para tocarlo a este nivel.
—Mikhail, ¿se siente bien?
—A-ahh, de verdad, no poder ver es duro.
Ah, entonces él no está mirando.
—Pero si estuviera viendo, saldría inmediatamente.
Salir, probablemente esté hablando de eso.
¿Mikhail lo hará debido a mis pechos?
De alguna manera, siento una sorprendente sensación de superioridad.
Sin palabras, acelerando mis movimientos, balanceándome de un lado a otro cada vez más.
—Oye, eso es- realmente... ¡peligroso...!
—Déjalo salir. Hagamos esto juntos.
—Tú- ugh...
—Puedes usarme como quieras, ¿sabes?
—¿Qué... estás diciendo...? Ah, hah, ya.. viene~
Después de esa encantadora voz, desde la punta de su erección, algo de arena salió impulsada... O debería haberlo hecho, pero la cosa blanca que cubría mi cara era un líquido viscoso y definitivamente no se trataba de arena.
Eso era un alivio. Temí que piedrecillas entraran en mis ojos.
Levanté la vista hacia él, que todavía estaba rígido.
Me pregunto qué tipo de expresión tendrá ahora.
¿Se arrepiente de haber hecho algo así conmigo?
—Esa cara tiene una fuerza destructiva asombrosa
—¿Ah? ¿¡Destructiva!? Qué- ¡eres demasiado grosero! 
Ya sea que esté sucia o no, de cualquier manera, decirle a una chica que tiene un rostro con una fuerza destructiva no es algo que debas hacer.
Además, el que me dejó así fue Mikhail.
Cuando lo miré con protesta, por alguna razón escuché un pequeño suspiro.
—No era en ese sentido. Ve a lavarte, el baño es por aquí.
—... Hm, gracias.
✿✿✿
—Bien. Quédate aqui.
—¡Se ve delicioso~!
Jean-sama había traído comida cuando se hizo tarde.
—No hubo contacto de la casa del duque, así que pensé que probablemente no habías regresado, pero... Como están las cosas, ¿crees que saldrán bien?
—Sí.
Él es quien fue coaccionado silenciosamente para que me dejaran vivir aquí, me pregunto en qué está pensando.
Estaba muy quieto, así que no pude entenderlo; pero como no lo negó, solo podía aceptarlo tal como está.
—Con su comida, probablemente morirás de hambre, Ángel. Hoy intenté traer comida hecha en lugar de ingredientes.— Dijo Jean-sama
—No como mucho, ¿sabes? Pero estoy muy feliz, de que vinieras aunque estés ocupado, lamento las molestias que te estoy causando.
Cuando acepté la deliciosa comida y los llevé a la mesa del comedor, el Primer Príncipe me ayudó.
No, Mikhail debería ser el que hace eso.
—Debería estar bien así.
—Gracias.
Después de expresar mi gratitud, con una cara de satisfacción, Jean-sama comenzó a retirarse. 
... Sin embargo, había algo que tenía que preguntarle.
—¡U-Um!
—¿Hm?
—¿Puedo pedirte que le envíes un mensaje a mi padre?
—... ¿De qué se trata?
No, si me miras con una cara tan seria se me hará aún más difícil de decir. Su mirada juiciosa era despiadada.
—Es decir, esperaba un libro de cocina.
—¿Cocina? 
Uuu.
—Sí. Parece que Mikhail no es tan bueno en eso, o por así decirlo.
Parece que no está haciendo mucho.
—¡¿Lo harás ?!
—¿Eh? Sí, pensé, probaría un poco.
Probablemente, no había manera de que Jean-sama pudiera venir todos los días. Pero aún así, a Mikhail no le gustará que otras personas vengan aquí, y si voy a las cocinas cada vez que merodeaba, siento que daría lugar a nuevos y extraños rumores.
—... Entendido. Haré los preparativos necesarios.
—Eh? No, no puedes.
Nonono, aunque es una buena persona, no tiene mucho tiempo libre.
Si pudiera traer lo que mi padre preparó la próxima vez que viniera... Eh, parece que no le molestará mucho después de todo. 
Uu ~ n.
—Gracias.
—¿Eh?
—Planeas vivir aquí, ¿no?— Jean-sama sonrió gentilmente, mirando hacia aquí. —En verdad, no puedo ofrecerle suficientes palabras de disculpas o de gratitud
—No, estoy feliz de poder estar junto a Mikhail
—Ya veo.
Se lo dije casualmente, pero de alguna manera fue un poco vergonzoso.
—Te lo dejo a ti.
—Sí.
La cara de esta persona me volvió a recordar a la de Mikhail desde hace mucho tiempo.
Mikhail... ¿me pregunto si se ve así ahora? 
Pero no podía ver eso, como era de esperar. De repente me embargó un sentimiento un poco solitario.
—Entonces voy a regresar. Tú también, no intimides a Ángel
Siento que ya me ha intimidado en cierto sentido, pero no debería decir eso. Definitivamente.
Y era probable que Mikhail pretenda ignorarlo. Jean-sama no parecía ser particularmente consciente de ello.
—Ángel tu también. Sal de vez en cuando. Estaré preocupado si te deprimes y te mudas de aquí.
Dejando esas ultimas palabras atrás, Jean-sama se fue. A pesar de que su rostro era sonriente, posiblemente estuviera serio al respecto.
No habían muchas ventanas. Donde se encontraban la mayoría eran unas cuantas en un pequeño puesto a lo alto.  Estaba oscuro incluso durante el día.
Aquí, solo durante cuatro años...
En cuanto a la interacción con otras personas, no tenía a nadie que lo cuidara cuando se enfermaba.
Mikhail, que vivió una vida como si estuviera exiliado, me preguntaba cuánto dolor ha estado soportando.
—Está bien, ¡vamos a comer!
—... Come tu sola.
Aunque lo arrastré con fuerza por el brazo para sentarlo en la mesa, todavía miraba hacia el otro lado.
—¡Finalmente estamos juntos, comer solos sería aburrido!
—Si comes conmigo, tu comida tendrá mal sabor.
No había considerado eso, pero realmente tampoco lo creía así.
—¡Comer sola no será tan sabroso!
—No como mucho.
¿Qué pasa con esa manera de hablar como si yo comiera mucho?
Incluso si insinuaba eso, no estaba gorda. En este momento, es solo que él estaba muy delgado... Ah, ya veo. No tiene apetito.
Si el lodo gotea mientras come... Solo por ver algo así, su apetito caerá. En primer lugar, no está viviendo una vida plena en la que considera importante una buena nutrición.
—¡Muy bien, entonces! ¡Te alimentaré! Cierra los ojos, Mikhail... ¿Los cerraste ya?
—Qué estas diciendo. Por supuesto que no.
Por su tono, seguramente estaban exasperado. Burlándose de mi brillante idea. Su forma fría se adapta sorprendentemente bien a su figura fría y arenosa.
—Puedo comer solo, y también comeré lo que quiera. Así que déjame en paz.
—No, pero, ¡definitivamente sabe delicioso! ¡Si lo que no quieres es verlo, te ayudaré! 
—Dije que está bien.
—Di ¡a~hh! 
Rápidamente coloqué una cucharada en su boca.
No tuvo tiempo para esquivarla y vi cómo la comida fue tragada en el agujero que se abrió en su figura.
Los gránulos de arena se movieron de nuevo para cerrar su boca, cuando miré más de cerca su mandíbula se movía ligeramente y parecía como si estuviera masticando.
Cómo debería decir esto... era artísticamente detallado.
No, no tanto como artístico, pero sus movimientos eran tremendamente suaves.
 O tal vez era solo yo y una cuestión de mi sensibilidad que lo veía de esa manera, o quizás la maldición era precisa en esos minuciosos detalles, no lo sabía. Pero de cualquier manera, si observaba cuidadosamente el movimiento de la arena, podría aprender sobre los finos detalles de sus expresiones y gestos.
—¿Sabe bien?
—Mhm.
—¿Cuál quieres a continuación? Si te alimento demasiado repentinamente y con fuerza, tu estómago enfermará. U~n, ¿qué tal este? 
—Todo está bien, así que lo haré yo solo
—No~
—Oye... ¡Nh..!
Con este nuevo bocado, sentí que esta forma arenosa delante mío, que abrió su boca honestamente, era de alguna manera linda.
—Come mucho, ¿si? A-hh 
—... Deja de bromear.
Mientras masticaba y me hablaba extremadamente insatisfecho, yo era increíblemente feliz.

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