sábado, 19 de octubre de 2019

Capítulo 07


—Sólo compré cosas al azar, ¿está bien?
Hina dejó la bolsa de plástico y se quitó los zapatos en la entrada. Hasegawa, que la había estado esperando, parecía incómodo mientras estaba sentado en el sofá y tomando su café.
Fue un corto paseo desde el apartamento hasta el noegocio más cercano. Hina había ido sola a hacer las compras.
—¿Cuánto salió? Le devolveré el dinero.
—No hay necesidad. Considérelo mi agradecimiento por dejar que me quede anoche en su piso y por ayudarme a limpiar hoy.
Mientras hablaba, Hina comenzó a cocinar. Mirándola mientras preparaba la tabla de cortar y el cuchillo, Hasegawa preguntó en un tono de curiosidad.
—¿Va a cocinar ahora? Estaba seguro de que acabas de comprar un bento.
—Pensé en comprar un bento para un almuerzo rápido, pero cuando vi los ingredientes de la comida, de repente ansié un Hot Pot*. Por lo mismo, voy a mezclar todo lo que compré en la sopa. Como es demasiado para una persona, apenas lo podría comer yo sola, pero siéntase libre de unirse a mí si quiere... ¿O quizás es del tipo que no le gusta compartir comida con los demás?
(*Hot Pot es una comita típica en varios países de Asia como Japón, China o Corea donde se deja hirviendo una sopa en medio de la mesa y en la que se introducen diferentes ingredientes para cocinarlos y comerlos en el momento.)
—... No es el caso.
Sintiéndose aliviada, Hina se rió ligeramente y comenzó a moverse. No mucho después, terminó de preparar los ingredientes y luego los colocó en la olla sobre la cocinilla.
—Qué gran olla...
—Realmente me gusta el Hot Pot, ¿sabía? Cuando hace frío, invito a mi mejor amiga y lo cocinamos ocasionalmente.
—Oh, ¿has dejado que la gente entre en esa habitación?
—¡C-cuando eso sucede, siempre limpio previamente!
Hina bramó, luego Hasegawa dijo con voz burlona.
—Si limpiase bien desde el principio, no tendría que desesperarse por esconderlo, ya sabe.
—¡Lo sé, pero he estado tan ocupada! Además, tampoco me gusta mucho limpiar...
—Si saliera conmigo...
—¡No tengo intención de convertirme en su ideal!
Mientras lo decía, Hina eliminó cuidadosamente los restos no comestibles. Detrás de ella, Hasegawa preguntó con voz profunda.
—Entonces, ¿qué tal ser mi novia?
—¡¿Qué?!
Al detectar la seriedad en su tono, Hina casi se cae en estado de shock.
—Si no tiene intención de convertirse en mi ideal, ¿qué tal si se convierte en mi novia?
—¿Qué le hace pensar que...?
—Está invitando a un hombre a su habitación y le ofreció una comida preparada por usted. ¿No es normal tener un poco de esperanzas?
—¡No es así! ¡Esto es solo una muestra de mi gratitud!
Mientras sofocaba con vehemencia su malentendido, las mejillas de Hina se sonrojaron un poco ante la franqueza de Hasegawa.
Después de que terminó de cocinar, se sentó junto a Hasegawa nuevamente. Pero Hasegawa se movió para crear una pequeña distancia entre ellos.
—¿No es un poco estrecho y difícil comer así?
—¿Lo es? Entonces, ¿por qué no nos sentamos en el suelo?
—Sería mejor, gracias.
Ambos se sentaron en el cojín del piso y comenzaron a comer.
◈◈◈ 
Después de que terminaron de comer y limpiar la habitación, Hina se puso su ropa cómoda de estar en casa. Tomó una cerveza enlatada del refrigerador y se la ofreció a Hasegawa.
—Tengo ganas de beber algo. ¿Quiere un poco, señor Hasegawa?
—...Usted...
Mirándola con un rostro atónito, Hina inclinó la cabeza confundida. Hasegawa se quitó las gafas y masajeó las arrugas que se formaron entre sus cejas.
—No, gracias. Tendré que negarme. Además...
—Entonces, solo le daré una taza de té.
—...
Mientras la observaba servirle té, Hasegawa exhaló un suspiro. Mientras tanto, Hina le lanzó una mirada de soslayo mientras abría la lata de cerveza después de un vigoroso batido.
—¡Uf! ¡Lo mejor!
En contraste con su buen humor, Hasegawa parecía estar un poco mal. Preocupada, Hina puso su mano sobre su frente.
—¡!
—Hasegawa, ¿está bien? Su cuerpo no parece estar... ¡ah!
Hasegawa agarró la mano que había colocado en su frente y el buen humor de Hina desapareció instantáneamente. De repente estaba mirando hacia el techo en el fondo, podía ver el rostro de Hasegawa muy de cerca.
En el momento en que se dio cuenta de que la empujaron contra el suelo, Hina entró en pánico. Supuso que esta era una mala situación, pero cuando trató de hablar, no pudo articular palabra.
Hina tragó saliva varias veces e intentó calmarse.
Finalmente soltó una voz baja y ronca.
—Um, ¿Hasegawa...?
—No tiene mucha precaución contra mí.
—No, eso... yo no siento que tenga que...
Cuando se quedó en su habitación, Hasegawa dijo que no la deseaba. Hina lo señaló y atrapó las cejas de Hasegawa.
—¡Eso fue entonces! ¡Esto es ahora!
—¡¿Qué hay con eso?!
—Parece que tenemos un malentendido, así que déjeme aclarar esto. Yo no siento deseo hacia usted así que por favor deje que la abrace.
—¡¿Qu-?!
Su cuerpo tembló en estado de shock. Miró a Hasegawa con los labios temblorosos sin decir nada. Al ver su reacción, la cara de Hasegawa se contorsionó con amargura.
—Si haces esa cara, voy a entender mal.
—¿Huh? ¿Qué cara?
—¡Una cara linda y adorable! ¿Qué más planea hacerme?
—¡No estoy planeando nada! Si hay alguien planeando algo, ¿no es usted, Hasegawa?
Ante sus gritos frenéticos, los ojos de Hasegawa se abrieron un poco. Luego, gradualmente volvieron a la normalidad.
—Una voz tan fuerte... ¿Por qué no está usando eso para gritar y pedir ayuda?
—¿Ah?
—Aunque he llegado tan lejos, si realmente no pensaba mucho en mí, debería haberse resistido más...
El sudor frío corrió por la espalda de Hina. Tenía que decir algo o de lo contrario realmente se la comerían a este ritmo. Mirándolo fijamente a los ojos, Ella abrió la boca para hablar.
—¡No, realmente lo veo como a un hombre! ¡Está bien! Prometo ser más cuidadosa la próxima vez, así que si pudiera moverse...
—Si me ve como a un hombre, ¿no debería resistirse más? En ese caso, ¿debería interpretar esto a mi conveniencia?
—¡Ahh!
Unos labios tocaron su frente. Dándose cuenta de que la habían besado, Hina miró a Hasegawa con una cara sonrojada.
—Um, ¿pero yo y su ideal, Hasegawa...?
—... Son diferentes, lo sé. Si tuviera que decirlo, preferiría una cara bella y no me gustan las mujeres que parecen un cachorro o algún animal pequeño como usted. Además, una mujer que deja su habitación en ese estado definitivamente está fuera de discusión.
—...Entonces...
—¡Pero no puedo evitarlo! ¡Me gusta! Me lo he preguntado varias veces: "¿Por qué es usted?" Pero antes de darme cuenta, mis ojos siempre la estaban siguiendo y si la veo hablando con otro empleado, no puedo evitar enojarme. Incluso después de ver una habitación tan desastrosa, todavía no me he desilusionado. Más bien, pensé que "si yo no hubiera estado aquí..."
—Sobre eso... estoy realmente agradecida por su ayuda...
Aunque fue Hasegawa quien estaba abriendo a su corazón, Hina tenía ganas de morir de la vergüenza. Cuando miró a Hasegawa, notó que su rostro también estaba un poco sonrojado.
—No me importa si tiene a alguien que le guste. ¿No podría enamorarse de mí poco a poco?
—Um...
—Si lo odia, entonces aléjeme, ¿de acuerdo?
Soltando su mano, Hasegawa se acercó lentamente. Al ver su rostro acercándose, Hina tragó saliva.

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